Kieran Egan




Critica los principios en que se basa la didáctica en la escuela primaria, según la cual los niños sólo aprenden si se procede de lo concreto a lo abstracto, de lo conocido a lo desconocido, de lo sencillo a lo complejo, y de la manipulación a la conceptualización simbólica. Estos planteamientos olvidan las herramientas fundamentales con que cuentan los niños para atribuir significados a su experiencia y a la nueva información que reciben: la imaginación y la fantasía.

Actualmente la mayoría de los autores, basándose en observaciones empíricas, afirman que los niños aprenden a partir de lo que ya saben. Por tanto, cuando los niños llegan a la escuela, son capaces de producir imágenes mentales y tienen emparejados unos conocimientos abstractos potentísimos: bondad/maldad, valor/cobardía, verdad/mentira, etc. Tanto las imágenes mentales como los conocimientos abstractos permiten a los niños comprender Blanca Nieves, o hacer que en su imaginación los animales hablen, aun cuando saben por su experiencia que esto no es así.

Si sabemos que lo anterior es cierto, entonces no podemos afirmar tajantemente que el niño aprende de lo concreto a lo abstracto. Por tanto no podemos decir que no se enseña Historia a los niños pequeños porque éstos no tienen los conocimientos abstractos necesarios para darle sentido. Los niños cuentan con las herramientas conceptuales necesarias para dar sentido a la Historia, para aprender sobre nuestro pasado, para entender la lucha por la libertad y contra la violencia, etc. Los niños utilizan estos conceptos para aprender sobre aspectos del mundo y de la experiencia.

Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis